Tras las nuevas medidas y reformas a tratar-se en la cámara alta.
La medida fue definida el jueves durante el Consejo Federal que el gremio de los estatales realizó en San Luis, donde las 191 seccionales del país votaron por unanimidad la huelga.
La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) ha decidido organizar un paro nacional que coincidirá con el debate parlamentario sobre la reforma laboral, impulsada por la administración del presidente Javier Milei. Según lo anunciado, esta acción sindical formará parte de las estratégicas protestas que buscan ejercer presión sobre las decisiones gubernamentales que se consideran perjudiciales para los trabajadores.
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En una reciente reunión llevada a cabo en San Luis, en el marco del Consejo Federal, las 191 seccionales de ATE de todo el país aprobaron por unanimidad la propuesta de parar el día en que el Congreso debata la reforma laboral. Además de establecer la fecha de la huelga, los representantes sindicales otorgaron un mandato firme a su conducción nacional para desarrollar manifestaciones sorpresivas a lo largo de diciembre, como respuesta a la falta de avances en las negociaciones.
El secretario general nacional, Rodolfo Aguiar, ha manifestado que el Consejo de Mayo, instancia diseñada para discutir el proyecto de reforma, se convirtió en un recurso distractivo, un medio utilizado por las autoridades para prolongar innecesariamente las conversaciones.
Aguiar subrayó que la propuesta legislativa ha sido orquestada para beneficiar al sector empresarial, indicando que las pautas son redactadas fuera de las negociaciones oficiales, haciendo especial mención de las oficinas de Techint como sede donde se dictan las líneas maestras del proyecto.
La crítica ATE no solo se centra en la inminente reforma laboral; el sindicato ha insistido en la urgencia de reabrir las paritarias estatales. Según los datos provistos por ATE, la inflación acumulada entre enero y octubre fue aproximadamente del 24,8%, mientras los incrementos salariales apenas alcanzaron el 13,6%. La notable diferencia ha resultado en una merma considerable del poder adquisitivo de los empleados estatales, intensificando el malestar general en el sector público.
Por último, ATE ha expresado disconformidad frente a lo que han descrito como «una paritaria virtual», convocada para este viernes, remarcando la clara intención del gobierno de evitar la confrontación directa y la discusión abierta.
