Netflix aumenta sus precios desde agosto: cómo impactará en los hogares argentinos

A partir del 5 de agosto, el plan básico de Netflix subirá un 20 % y pasará a costar $7199 sin impuestos. La medida forma parte de una nueva estrategia global para mejorar la rentabilidad del servicio, en medio de una transformación profunda de la industria del streaming.

Netflix aumenta sus precios desde agosto: cómo impactará en los hogares argentinos

Si sos usuario de Netflix, preparate para un nuevo ajuste en tu factura. A partir del 5 de agosto, la plataforma aplicará una suba del 20 % en sus planes, lo que llevará el precio del plan básico (sin impuestos) de $5999 a $7199. Aunque pueda parecer un incremento moderado, para muchas familias representa un nuevo desafío en el contexto de gastos mensuales cada vez más ajustados.

Este aumento no es un hecho aislado: responde a una estrategia global que marca un cambio de paradigma en el mundo del streaming. Luego de años enfocados en captar usuarios a toda costa, ahora la prioridad de plataformas como Netflix es hacer más rentable cada cuenta activa. Eso incluye subir precios, restringir el uso compartido de contraseñas entre distintos hogares y promover los planes con anuncios como alternativa más económica.

Una industria en transición

Producir contenido original de calidad, como las reconocidas series The Crown o Stranger Things, demanda presupuestos millonarios. Para sostener ese nivel de producción, las plataformas necesitan ajustar sus ingresos. Además, Netflix, pionera en limitar el uso compartido de cuentas, busca incentivar que cada hogar tenga su propia suscripción o abone un extra por agregar usuarios adicionales.

Otro punto clave es el impulso a los planes con publicidad, más accesibles en precio pero con interrupciones durante la reproducción. Esto no solo representa un ahorro para los usuarios, sino también una nueva vía de ingresos para las plataformas, que venden espacios publicitarios en sus contenidos.

Qué opciones tienen los usuarios

Con los nuevos precios, muchos deberán repensar qué plan contratar. Los paquetes más caros ofrecen mejor calidad de imagen, más perfiles y dispositivos simultáneos, pero no siempre son necesarios. Una buena alternativa puede ser optar por el plan más básico si el consumo es ocasional, o evaluar qué tanto se usa Netflix en comparación con otras plataformas como Disney+, Max o Amazon Prime Video.

También se recomienda estar atentos a promociones, combos con empresas de telecomunicaciones o descuentos por contratar varios servicios juntos, que pueden aliviar el impacto del aumento.

Una señal de lo que viene

El aumento en Netflix es solo una muestra de un fenómeno más amplio. Otras plataformas también avanzan hacia modelos de negocio más sostenibles, y es probable que adopten medidas similares. Frente a este escenario, muchos usuarios buscan formas de equilibrar el consumo con el presupuesto disponible: alternar servicios según los contenidos del mes, compartir gastos en un mismo hogar o resignar calidad para mantener el acceso.

En tiempos donde cada gasto se mide con lupa, el entretenimiento desde casa sigue siendo una opción valorada, pero ya no tan accesible como antes. El desafío será encontrar el equilibrio entre lo que queremos ver y lo que realmente podemos pagar.