Esta mañana el Concejo Deliberante trató el proyecto de Ordenanza (515) de quema de neumáticos en la ciudad con presencia de los ediles Carlos Sánchez. Gerardo del Río, Julieta Wallace, Gerardo Avila, Ariel Cárdenas y su autora Claudia Torres la cuál sigue en tratamiento para su aprobación.
La concejal Claudia Torres (JSRN) es autora del proyecto, mediante el cual se apunta a prevenir daños en la salud producto de los residuos que genera este tipo de combustión.
Según explica el texto de la Ordenanza, se trata de una «práctica muy peligrosa», no solo por el riesgo de incendio, sino «porque la incineración provoca consecuencias muy graves tanto para la salud como para el ozono de la atmósfera».
El proyecto sostiene que estas quemas, «como sucede por ejemplo en manifestaciones», descarga grandes cantidades de sustancias tóxicas al aire libre, que «genera daños fatales para la salud y para el medio ambiente».
Describe que tales sustancias están compuestas principalmente por mercurio, plomo, dióxido de carbono, monóxido de carbono, tolueno, benceno y óxido de plomo, «todas ellas muy contaminantes».
Además, «los niños y los adultos mayores son especialmente sensibles a los agentes patógenos que ocasionan» este tipo de quemas.
Menciona su incidencia en enfermedades respiratorias como asma y bronquitis, «acelerando y desarrollando enfisema pulmonar y dermatopías alérgicas». Además, «aumenta el riesgo de desórdenes reproductivos y aceleran su predisposición, acompañando alteraciones al sistema nervioso y muertes prematuras».
Otro de los inconvenientes de este tipo de práctica, es que el fuego generado por los neumáticos «es difícil de apagar», ya que «el agua vertida sobre la goma no consigue penetrar y ahogar las llamas».
Esto, según se explica, se consigue «al privarlo de oxígeno, cubriendo con tierra la goma del neumático, además de que se destruye la cinta asfáltica».


























