Mientras en otros puntos del país todavía no hay grandes movimientos, en San Carlos de Bariloche explotó el invierno con miles de personas recorriendo sus calles, paseando por sus maravillas naturales y visitando sus montañas y parques de nieve.
Esa nieve que tanto se hacía desear llegó en la madrugada del domingo al cerro Catedral, para pintar de blanco el centro de esquí más desarrollado de Sudamérica y con ella, los visitantes que eligen una vez más el destino principal de las vacaciones invernales de la Argentina.
“Esto es el reflejo del trabajo de mucho tiempo de promoción que realizamos desde EMPROTUR, la decisión del intendente Walter Cortés de congelar el precio del pase de esquí, sumado al esfuerzo de los privados con la campaña Bariloche Sale para realizar importantes descuentos en productos y servicios”, señaló el secretario de Turismo municipal, Sergio Herrero.
Como siempre, Bariloche está a la vanguardia en lo que hace a estrategias de planificación turística y esta decisión de mantener los mismos valores que en 2024, ya comienza a reproducirse en diferentes destinos del país, según lo reflejan los principales medios de comunicación.
Mientras tanto, en la ciudad de los lagos del sur se espera para los meses de julio y agosto, más de 220 vuelos directos desde Brasil, conectando San Pablo, Porto Alegre y Belo Horizonte. Además, Aerolíneas Argentinas y otras compañías aéreas incrementarán sus frecuencias hacia la ciudad durante la temporada alta.
Con la mayor conectividad aérea de su historia, Bariloche se consolida como uno de los destinos más accesibles del país, tanto para turistas argentinos como del exterior.
“Todo el esfuerzo realizado por cada uno de los actores del turismo de nuestra ciudad, ahora comienza a dar sus frutos. Estamos y estuvimos a la altura como destino turístico en un momento difícil de la actividad y del país, y eso hoy tiene su premio. Cumplimos con lo pactado y ahora es tiempo de tener mucho trabajo para todos los rubros como la hotelería, la gastronomía y los servicios. Ahora es tiempo de ser los mejores anfitriones”, agregó Herrero.
Bariloche empieza a vivir el invierno, una de las épocas más esperadas del año, con turistas ansiosos en que su estadía sea acompañada con nieve y así poder llevarse el recuerdo imborrable en sus retinas de los mágicos copos blancos cayendo lentamente, además de los juegos, la guerra de bolas, el armado de los muñecos de nieve, así como la práctica del esquí y del snowboard.
Además, los visitantes pueden llenarse de adrenalina en la nieve, desconectarse en plena naturaleza, compartir momentos únicos en familia o con amigos, hacer deportes de montaña o probar lo mejor de la gastronomía patagónica. Por todo esto, sin dudas que es la ciudad por excelencia para vivir y disfrutar de unas vacaciones inigualables.

