Ante el cambio climático, se ha detectado que se derrite el glaciar Ventisquero Negro, por lo cual se genera un nuevo lago en Bariloche y de esta forma se comprueba que el retroceso de glaciares es una de las consecuencias más graves del cambio climático.
La doctora Beatriz Modenutti, investigadora superior de Conicet del Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Medioambiente (Inibioma) y de la Universidad Nacional del Comahue, que actualmente se encuentra junto a grupo de investigación desarrollando su trabajo en el cerro Tronador, aseguró que “En las regiones montañosas, el signo más evidente del acelere que tiene el cambio climático, es la pérdida alarmante de glaciares, que lleva a la pérdida de un ecosistema particular”.
Además de la aparición de nuevos lagos una de las consecuencias de manera directa, es el cambio de temperatura que sufren los lagos. De esta forma algunos organismos que viven allí, ante la situación de que la temperatura suba 1 grado representa un cambio drástico en la reproducción de las especies, lo que da como resultado un desequilibrio en el ecosistema acuático. Modenutti dijo además que “esos pequeños cambios representan un trastorno enorme”.
En lo que respecta al glaciar Ventisquero Negro, se observa una retracción importante durante los últimos años “y la formación de un lago cada vez más grande que ya tiene 70 metros de profundidad”. Además, originalmente, el agua del lago es oscura. Sin embargo, ahora se detectan cambios en el río Manso y en el lago Mascardi, ya que el agua se está aclarando porque recibe mucha menos arcilla de los glaciares.
Fuente. Bariloche.O.